martes, 21 de julio de 2015

NURIA RUIZ DE Viñaspre / 9 poemas de pensatorium



9 poemas  de pensatorium
la garúa libros 2014






todo pensamiento empieza con un poema
Alain
[en un intercambio con Paul Valéry]




I

El lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje […] Ambos son animales de presa que nacen desde el lenguaje corporal del lenguaje corporal del caballo […] Y cuya supervivencia depende de la habilidad de percibir incongruencias como esta.




II

pensarte o no pensarte
ponerte fe –sucesión de páginas-
o ponerte fin -diluvio de lo blanco y de lo inútil-





III

escribir es inscribir


vivir en el cuerpo del di-lema
lema lema lema lema
ya lo he dicho
mi cuerpo se ha posicionado





IV
vivimos en un mundo caído
nosotros, los caídos



no existe un lenguaje para los finales
el Ártico se derrite
hay una voz muerta en tus labios
una voz que va y viene
como los amantes van y vienen 
cae una lluvia de ideas ácidas en los campos los campos
en los despoblados campos un caballo
allana los cipreses rotos 
hay una voz muerta en los campos
es una voz prisión una voz fortaleza
dos voces que se parten en la misma memoria




V

el lenguaje es el resorte de la seducción
pero el lenguaje no es suficiente
cuántas veces el día está lleno de términos que son trampantojos
artilugios que tienen dos tres cuatro veinticinco sentidos
cuántas cuántas cuántas veces entramos en el juego
así es imposible formular nada




VI

pensar como piensan
las líneas de la naturaleza





VII

no diré A, dice el escolar con empecinamiento
¿pero por qué? porque después de eso, habrá que decir B
[…] ¿y si no se termina nunca, para qué comenzar?

Simone de Beauvoir


es materialmente imposible para el ser humano
decir toda la verdad
absolutamente toda la verdad
y es imposible no porque no queramos
sino porque no habría palabras suficientes
por eso vamos buscando coartadas en la casa del lenguaje
como si fuéramos expertos caballos analíticos





VIII

¿Cómo se cruza una porción de noche desde el centro de la asimetría? ¿Cómo cruzarla con el hemisferio oeste desencajado? ¿Sin palabra ni razón estructurada? Barandillas y tendales. Puentes. Pomos. Cuerdas. Nada. ¿Cómo se cruza la noche con esa certeza de fractura elástica? ¿Cómo? Si la mueca nos dice que la vida era ese quiste en la garganta. ¿Pero cómo se encajan los quistes? ¿Cómo sustraer el bulto sin volverse loca como un rayo? Después el vacío. Esa fisura que abrieron los pájaros emigrados al hemisferio este.





XIX

la gana del sujeto de ser torrente
empujará mi predicado











NURIA RUIZ DE Viñaspre (Logroño 1969). 

Trabaja como editora en el Grupo Anaya y dirige la colección Eme (Ediciones La Palma). 

Ha participado en Encuentros Nacionales e Internacionales como el Coloquio Le créateur et sa critique de la Université Lumière Lyon 2 (Instituto Cervantes, Lyon, 2013) y el Seminario Internacional Espacios de infancia, espacios de exilio, en colaboración con la Universidad de Jaén y Sorbonne Nouvelle–Paris 3 (Jaén, 2013). 

Libros publicados:
El mar de los suicidas (Huerga y Fierro, 1999), 
Desvaríos subterráneos (Devenir, 2001 y Editorial Globo, 2001), El campo de tus sueños rojos (Mañana AC es Arte, 2003), 
Ahora que el amor se me instala (CELYA, 2004), 
La geometría del vientre (Poesía eres tú, 2008), 
El pez místico (Olifante, 2009), 
Tablas de carnicero (Luces de Gálibo, 2010), 
Órbita cementerio (Luces de Gálibo, 2011) , 
Tabula Rasa, junto a Ana Martín Puigpelat (La Garúa, 2013) y Pensatorium (La Garúa, 2014).

Otras publicaciones: CD-Libro La Cité des Dames (Capella des Ministrers. Licanus, 2013),
Temblor de lenguaje (Shangrila Ediciones 2014).

En 2004 ganó el XX Premio de Poesía Ciudad de Tudela (Navarra) y en 2014 fue galardonada con el Premio Racimo de Literatura.


                                            






miércoles, 15 de julio de 2015

MARÍA CRISTINA SANTIAGO / ALGUNOS POEMAS

MARÍA CRISTINA SANTIAGO


                                
                              


                                              (De Siempreviva , editorial Bajo la luna , 2009)

1.


Presencia de mujer
frente a fantasmas
Multitud, lava reunida
en esta plaza.
Silencio.
La voz va pronunciar
sus últimas palabras.
Vamos a ser
Jazmines mustios
Pero también raíces/ sobras
Una familia de hijos e hijas
construidos de arcilla
la más noble y oscura
la doliente
Esta enfermedad cala los huesos
Esta enfermedad nos sobrevuela
El ángel habla ahora
y nosotros en torno
a la pirámide
tiramos las muletas
libres de tradiciones en la espera
Porque al final de cuentas
después de la palabra
estaremos limpios

Un prodigio esta tarde
en que la voz se apaga
Dadas las circunstancias
comulgar significa
casa, comida
y hasta tal vez
la dentadura nueva
parece que hemos caído en trance
o agonía
Ella abre los brazos
Pronuncia algunas frases
y se vuelve
para llorar sus vísceras
por nosotros
Carne de animales
en huelga
Bestia feroz que en esta
bacanal del duelo
respira
la gran promesa
y lo que es más

la despedida.







7.



Como las moscas domésticas
ocupan
gran parte de la cabeza
y se avalanzan sobre
los puentes
portando estandartes
con su  foto
La generala
abre
la columna
y por ahí derraman lágrimas
los tristes
¿Qué enigma alberga
el seguimiento
de un personaje?
¿Qué mapa se articula en torno?
Quien se apropia
del cuerpo muerto
posee el mito
mientras escribe
una conspiración

contra el olvido








                             
                                                   (del Libro de la Luz, inédito)


manuscrito


nada de blanco sobre blanco
mejor un plumín fino
que debe mojarse en tinta china

para deslizar como un patín
encima de la hoja
el trazo leve

papel  d´Archés aguarda
con su trama abierta

virgen
la novia espera

gota de miel
que dejará
el amante








PIEDRAS EN LA BOCA


Si al atardecer
consiguiera rendir mis brazos
de trabajar exhaustos
daría gracias a dios
por el regalo.

Pero no trabajé como se debe.
No al menos 
a la manera extraña y sudorosa
de acarrear piedras
que muestran  algunos  escultores
Sin ir más lejos  al estilo de Irurtia
quien con su dura forma
hasta concibe un monumento
para exaltar el logro y la jornada
Mastiqué palabras como guijarros, eso sí,
las mastiqué hasta que
se hicieron sangre entre
los dientes                                                                                                   
igual que si hubiera mordido
duros trozos de granito
entre otras piedras,
alabastro
o algunas menos bellas al oído
pero útiles cuando la rabia ocurre
necesarias también para
deshacer entuertos. Turmalina, digo,
ésa que no permite que se crucen por tu camino
las malas ondas
Ayer escupí una amatista  a la que
por su tamaño, ni el gusto le tomé
Amatista tan grande que - tarde me di cuenta- 
no se  deslizaría por mi garganta
Quiero ablandarlas  entre el paladar y la lengua
para robarles la esencia
Doy vueltas en mi boca un ojo de tigre
como si fuera un caramelo de leche

.-Cuidado con la malaquita, es traicionera,
le digo a la hija de una amiga
trae energía más densa que la energía de otras
y sin que te des cuenta pronto vas a estar vos,
endurecida

Pero las chicas son jóvenes “se visten y salen”*
son bellas y no les interesa
la sabiduría  que contienen  las piedras
Necesitan lucirse
cual pavo
que se despliega
en  coloridas plumas

-No las uses de adorno:
torturalas, mordelas, partilas entre los colmillos
aún si se te triza uno
hacelo hasta sacarles el jugo
como a una palabra
Así conocerás
que la domesticaste.
Podrás irte a la cama
con la conciencia limpia.
Tu boca bulle sangre
y la misión , cumplida
aunque seguís sosteniendo la creencia
de que no has hecho nada
a lo largo del día.





Si esta habitación adonde ...


Si esta habitación adonde se reposa
fuera de todo el mundo
mis dedos extendería hacia una luz
invisible. Prontos a derrotar
leyes del movimiento.
A través de un lieder me deslizo.
Homenaje baldado
de quien casi no espera.
Pero si de esperar, eso se trata
qué hace el color que no
aparece para impregnar los dedos
en blanquinegro y también la ropa.
El esqueleto es
pentagrama adonde se está inscribiendo
una melodía
que nadie osa tocar porque las notas
tal vez anuncian fuego.
Terrible mancha sobre el cuerpo quedó
en otras semejantes circunstancias
y  ahí nadie lloró,
cada lágrima hubiese sido de oro
más la consigna era
no derramar riquezas sobre el campo
enemigo. Vivir
para contarlo
era lo único que
no debía hacer
y sin embargo lo hice.
Bordo de a poco con
cierto disimulo el
manto terrestre que tejen amigas.
Este vestido no es de luto está
hilado en macramé
pero me cubre entera.
Por eso lo dejaron los inmortales
sobre mi propia cama
para que nadie espíe en cuarto ajeno.





María Cristina Santiago nació en Buenos Aires.
Es Profesora en Letras egresada de UBA

Formó parte del proyecto editorial Nusud y del consejo de redacción de la revista El desierto.

Miembro del comité organizador de la ANTOLOGÍA ORAL DE LA POESÍA ARGENTINA, realizada por Libros de Alejandría en el Centro Cultural San Martín

En poesía publicó: 

Soy el Lugar de las Apariciones (La Lámpara Errante, 1984), Fuera del Serrallo (Nusud, 1991), 
Vidrieras De Ámsterdam (Nusud, 1996),
El libro de las aguas (Libros de Alejandría, 2003), 
Siempreviva (Bajo la luna, 2009).

En prosa, la nouvelle Lucía, por mirar de reojo, Ediciones del Citrino, 2000, colección que dirige en la actualidad.

Vidrieras de Ámsterdam obtuvo el primer premio del Fondo Nacional de las Artes, 1995.Este poemario fue reeditado por Ediciones del Dock en el 2011
Tiene inéditos Libro de la luz  (poesía) y Las Aguirre (novela)





lunes, 6 de julio de 2015

ALEJANDRA PULTRONE / 9 POEMAS


ALEJANDRA PULTRONE / 

9 POEMAS





                                                                    (De Hopper,  Libros del Empedrado,1994.)




Trasnochadores

puede pensarse
la ciudad sin voces

lo que se ve
un bar partiendo
las cenizas de cada fondo blanco

los vagabundos a cuestas
halcones con nombre a la deriva







El sol en una cafetería

Cuatro mesas
Invitadas a permanecer

Y esas sillas
derrotadas por la espera



Verano

el ventilador
apoyado sobre una mesa
el desgano
llega para quedarse

la chica
quiere irse con sus zapatos negros

el sudor
cae
como bocas besadas






                                                                               ( De Restos de poda, Teína, 2004)





Parque

cuidado
con aquellas piedras
dijo mi madre

corrí
cayó mi rodilla

la cicatriz
persiste
la sangre
más roja




Parentesco

la carterita
ocultaba
recientes vicios

la prima
inauguró
esconderse en el altillo
a bocanadas
encender el fuego
los ojos grises
del humo



Intimo

el diario
cierra la letra
escrita
con apuro
con temblor

el baile
los chicos nuevos

las dedicatorias familiares
pactan
en las hojas

la letra
de la chica de quince
se dobla
sobre sí

fin de la fiesta








                                                                                             ( De Seca Palabra, inédito)


                                                     
                                       (Trilogía parnesiana)



Plath

caminaba
por el cuarto de los niños
a media luz
a media asta
como una débil
luz ceñida
una llama parpadeante
encendida
con un fuego

arrebatado de otro
fuego




Thénon

obstinada
no sucumbas
al eterno femenino

iniciar el fuego
desperdigar aromas
cautivar al auditorio

resiste
obstinada
con el mínimo decir

a medio mundo
a media boca
que sí
¿es mía?

a hacer
con nada
lo posible




Pizarnik

pálida de fuego
errante de amor
huyendo
hacia su propio centro






Alejandra Pultrone nació en Buenos Aires en 1964.
Codirigió el sello editorial de Poesía Libros del Empedrado.
Libros publicados:
La cuerda del silencio, 
Hopper,
Ciudad demolida, 
Restos de poda.





Alejandra Pultrone . Foto Agustín Mourelle 

jueves, 2 de julio de 2015

EL ÁNGEL HÚNGARO: From Within / JOSÉ ANTONIO RODRIGUEZ ALVA


 From Within


Desde dentro una música anuncia
el platillo de la limosna,
la harina oscura del desaliento,
¿qué hace ese hombre con ese piano? 
están mordiendo el aire,
está ardiendo la esquina de la tarde
mientras bailan los cocodrilos.
Desde dentro
la amenaza ladra sin fin
buñuelos de desapego urgentes,
mírate tan fiero y anegado en lágrimas
en la casilla 49 de un juego antiguo,
la enredadera del silencio
en un compás de espera.
Desde dentro y abajo 
un violonchelo,
el imposible de unas manos
que no quieren serlo,
la estrategia de la herida
para el asno que no puede detener 
sus pies ante la fragua.
Desde dentro
nadie se detiene,
¡pero hay que escuchar la música
mientras suena!,
los arpegios de una voz
que muda el tono
ante la inminencia del contacto.
Desde dentro
nunca acaba el repicar
de los pulsos,
el platillo de la limosna,
pero es suficiente el pago
si el aire es tuyo
y lo obtienes libre.
Desde dentro
en la torpeza hay un editor 
inexpugnable y el corazón azul
es el azul que contará el mar
a la gente asustada.
Desde dentro
y en mis rodillas
una mujer despliega un paraguas,
consciente de sus cabellos 
y de los potros.
Desde dentro 
voy a promover el sortilegio
dentro de mi alma.
Desde dentro
lo más burdo se halla en el ego
y en lo sutil la alegría,
déjate crecer las uñas nuevas
para echarte a volar
cuándo deje de llover,
que amar es nube y febrero.
Desde dentro
pensar es tan atractivo y el frío
aún puede ser más fiero.
Desde dentro,
somos hijos de un dios que habitó
en la tormenta.
Si amaneces con la flor 
no la distraigas
y ahora suéltala, 
déjala ir, vete.
Deja también a este poema,
descansa
y vuelve más tarde.


EL ÁNGEL HÚNGARO: From Within: Desde dentro una música anuncia el platillo de la limosna, la harina oscura del desaliento, ¿qué hace ese hombre con ese piano? ...