sábado, 13 de abril de 2013

NATALIA LITVINOVA

NATALIA LITVINOVA

LA DECADENCIA

 
Lo recuerdo muy bien. Corría el año 89.
No muy lejos cayo un muro. Cambiaron
las modas y las muecas.
Solo los monumentos tardaron en desaparecer.
Los que no podían escribir, escribieron.
Los que conseguían leche en el mercado negro
tuvieron mas hijos.
Todo se llenó de fe desesperada.

(de su libro "Todo Ajeno")

LEONOR CALVERA / algunos poemas de RAÍCES EN LA ARENA

LEONOR CALVERA

algunos poemas de RAÍCES EN LA ARENA



XI *

Hacia el porvenir con nuestros muertos
en injusticia, en opresión, en mascaradas.

La voz de quienes ya no están
resuena para el caminante de la esperanza,
resuena libre y luminosa
al final de una sociedad
de imaginaciones esclavas.


XIX*


Reposo sobre los muros conocidos
de la lengua social,
talismán labrado a medida
de la pequeñez humana.

Mas el poder de la palabra
desafía al azar
y se condensa en nubes,
en constelaciones de señales
seguramente de no saber.

Juego su historia
la reto a combate
y caigo en la agonía del silencio
al buscar legitimarme
en el decir de los ángeles caídos.




VII

Niño pequeño,
me acurruco estrechado por brazos de viento.

Adulto-oruga
cruzo los brazos,
sentado en la arena fina
entre árboles destrozados
por un viento que no cesa
desde que despertó la mañana.



V *

Traigo la noche engarzada en las ropas.
La oscuridad del cuchillo ajeno
que busca el pecho con mensaje de plata.

A lo lejos, gasas de lluvia tendidas
sobre el violeta de plantas enfermas.

Escondida del camino
en el camino
el humo traga mi figura.

Cubierta con galas prestadas
entro en la mansión de los otros.



X

Tiemblas como el corazón del ágata.
Te apuñalan los malos pensamientos
que traspasan los poros de la piel.
Te quedas fuera de las puertas
colmando el aire con un grito sin lengua.

Tu cuerpo huye pero queda
junto a la golondrina del miedo
que descifra peligros
en todas las estaciones.

No marques cruces en el viento
ni escondas el alma
en la úlcera del temor.
Abre por fin tu boca
y niega el miedo




(de su libro Raíces En La Arena )


foto de AliciaGallegos



LEONOR CALVERA

Leonor Calvera nació y vivió en Buenos Aires, en el barrio de Belgrano.
 Poeta, traductora, escritora e investigadora. Militante feminista, toda su vida
 Ha realizado una vasta labor en los estudios de género y de religiones comparadas, siempre en procura de  establecer mejores puentes de acercamiento entre los seres humanos.
Como traductora, ha publicado más de cincuenta títulos de las más destacadas obras occidentales y orientales sobre el tema de las religiones.
Ha colaborado en distintas antologías del país y el exterior y recibido numerosas distinciones.
Formó parte como jurado de ensayo de la SADE (Sociedad Argentina de Escritores), el Fondo Nacional de las Artes y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Dirigió el Grupo Némesis (www.gruponemesis.com.ar) ,

Editó el blog Mujeres del Tercer milenio (mujeresdelmilenio.wordpress.com) y fue vicepresidenta de ACARMAS (Academia Argentina  de Masonería, Ciencias Primordiales e Iniciáticas y de la Tradición Hermética).


EUGENIO MONTALE

EUGENIO MONTALE

¿De qué podría lamentarme? He logrado vivir mucho sin lustrarle los zapatos a ningún tirano; he expresado a veces opiniones heterodoxas sin terminar sobre una hoguera ardiente; he visto subir a los estrados de la vida pública a criminales idiotas y no me faltó el placer de ver a algunos -¡no a todos!- rodar de sus sillones (placer atemperado por los horrores que hicieron posible este evento); he visto la realización de grandes conquistas del pensamiento humano, prodigiosas pero quizá más estúpidas de lo que puede creerse; he hallado incluso héroes ignorantes de serlo y santos no registrados por ningún santoral; he visto desaparecer muchas miserias y muchas plagas, pero también consolidarse muchas formas de servilismo colectivo, y me ha parecido descubrir solo una ley general: cada ganancia, cada avance del hombre, está compensado por pérdidas equivalentes en otras direcciones, mientras que el total de la posible felicidad humana permanece invariable. Pero, en resumen: ¿por qué debería considerarme desdichado de vivir en un tiempo que ha matado tantas necias supersticiones y que todavía (no sé hasta cuándo) me permite escribir sin recibir órdenes desde arriba o desde abajo?


Eugenio Montale, "Montale", por Giuliano Manacorda, Il Castoro, Florencia, 1969. En "Antología", traducción de Horacio Armani, Fabril Editora, Buenos Aires, 1971

PATRICIO TORNE / LOS QUINCE MINUTOS DE GLORIA

PATRICIO  TORNE

LOS QUINCE MINUTOS DE GLORIA

“Todo el mundo debería tener derecho a quince minutos de gloria”.
-Andy Warhol-


Una pesada carga,
eso ha de volverse.
La gloria ya celebra en otro sitio.
Igual que en el jardín,
la efímera existencia
con la que habrá de encantar
la flor de un día.
No basta con estar
en buen estado, ni saberse
una por una las reglas del éxito.
Cada vez más pesada,
la luz, termina por aplastar.
Toda luz,
como una nube,
tapando hasta ser ella,
sólo ella, una nube de luz
matando al sujeto que la ostenta.

Pasado el cuarto de hora,
alguien tendrá el vigor,
la gloria,
de levantarla sobre su cabeza
por otros quince minutos.

IRENE GRUSS / VIAJO

IRENE GRUSS

VIAJO



 "Esto no es natural", dicen;
floto y avanzo por encima de nubes,
allá abajo veo mapas, franjas
o líneas, marea el escuchar conversaciones
por encima de las nubes, el cielo disminuido a una ventanita, no a Dios,
"esto no es
natural, hace calor en mayo pleno",
es otro mundo, voy adonde no sé,
floto como el misterio,
viajo y pendo del aire.




Irene Gruss presentando su antología en España

ALEJANDRO SCHMIDT / UN HOMBRE VA AL TRABAJO

ALEJANDRO SCHMIDT

UN HOMBRE VA AL TRABAJO



Un hombre va al trabajo

con una chaqueta liviana y una camisa

gastada, celeste, a rayas



camina bajo el temporal

hunde sus botines de caza

con el opaco gesto que guardó desde su infancia



la lluvia equivale a su elogio de lágrimas

y esa pobre vieja torpe

-es lo que piensa mirando adelante

un brazo sobre el corazón cubriendo su camisa-

y esa  pobre vieja torpe

es tu madre

el sitio donde te transfiguraste…



Cuando llego a la escuela industrial

donde vigilo la sangre de los niños

las secretarias me miran con piedad

(con ese amor destinado al que perdió su vida

y no lo sabe

al que perdió su vida y lo sabe)

y me prestan un peine y una toalla rota

esa misma en donde limpian sus aguas

de tintas y restas…



Estoy conforme

no quiero que nadie me de nada

sólo abran las puertas del Infierno



y caminaré hasta las pezuñas de oro

mojado por la memorias de la eternidad



ando pegado a la pared

para evitar la ceguera de los autos







una puerta se abre

y veo

los tormentos de un ambiente apacible

mujeres con mirada de taza

adolescentes rizados por la lluvia

el padre desnudo en su piloto

en esta situación animal descubro mi inocencia



madre



la ropa que me diste

ya la gastó tu hijo

comprando tu silencio

mirame ahora como siempre

soy ese hombre que camina bajo la lluvia



pensando en tantas cosas.



Alejandro Schmidt (n. Villa María, Córdoba; 3 de mayo de 1955) es un poeta, editor y periodista cultural argentino.
A partir de 1982 funda y dirige diversas revistas literarias, como Luna Quemada, Huérfanos, El Gran dragón rojo y La mujer vestida de sol. Entre 1990 y 2007 dirigió la Editorial Radamanto en la cual se editaron plaquetas, folletos y libros dedicados a la poesía argentina y la colección de carpetas Alguien Llama. Desde la década del ’80 colabora con más de un millar de artículos en diarios de su ciudad y el país. A modo de libros, plaquetas, folletos y cuadernillos publicó más de 40 textos de poesía. Integra más de 50 antologías del país y América Latina. Fragmentos de su obra fueron traducidos al inglés, alemán, italiano, portugués, catalán y rumano. Dos de sus libros fueron transcriptos al sistema Braille. Colaboró con publicaciones de Uruguay, Chile, Brasil, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Cuba, Costa Rica, Puerto Rico, México, Estados Unidos, España, Italia, Alemania, Austria, Rumania, etc.

Su blog http://romanticismoyverdad.blogspot.com/

ROGELIO RAMOS SIGNES / TARDE DE PRESAGIOS

ROGELIO RAMOS SIGNES

TARDE DE PRESAGIOS

Algo extraño está por suceder.
Siento olor a tierra mojada
cuando abro mi pasaporte,
veo el encanecido color del viento
entrando en la despensa cerrada,
escucho el crecimiento de las plantas,
el insoportable ulular de las estrellas.

Algo difícil de explicar está por suceder.
Juego con tus huesos y se me hiela la sangre,
por decir “araña” siempre digo “Penélope”,
contagio de tristeza la alegría de los bailongos,
cocino a temperaturas bajo cero
el encendido carmín de tus labios,
entiendo la letra de los médicos.

Algo que no aparece en los libros está por suceder.


MOVIMIENTOS RELATIVOS

Bajo la tenue luz del atardecer
el señor cura ha perdido el pelo,
no sabemos qué sucederá con sus mañas.
Una jovencita sin corpiño
que hizo de Guillermo Tell
en una fiesta escolar
pregunta si está nevando, pero nadie le contesta.
Los prestamistas del barrio
insaciables
mueven sus primeras piezas.
Los peones rodean al alfil
mientras el alfil abre y cierra su canasta.
Por el blanco de las manos
sabemos que el talco no se ha perdido
y que los juglares de los nuevos tiempos
finalmente actuarán para nosotros
aquí,
tras el ligustro, bajo la escalera.
Tiemblan los cristales de la trinidad.
El agente de prensa de la parroquia
sale a desmentir algunos trascendidos:
no es que el señor cura haya perdido el pelo,
sucede que ha crecido su tonsura
hasta dejarlo calvo.

CARLOS BATTILANA

CARLOS BATTILANA
 



 En esta habitación
atascado por los papeles
y las palabras
me obligo
a trabajar.
El cielo está gris
la ciudad
parece
una tierra de nadie.
Mi hijo mi brazo mi cuerpo.
Dame agua, un poco de sed,
ilusión
ante la espera.
Pues bien
deletrear palabras
cavar un pozo
decirse al oído
susurrando:
el temor
no hace
hombres

(Hombres - Carlos Battilana - del libro: "La demora", Editorial Siesta, 2003)

JONIO GONZÁLEZ / RABINO

JONIO GONZÁLEZ

RABINO



si todo peso es ligero
con respecto a otro
y la moneda en la mesa
es un signo del hambre

 si una vara de oro
mide igual
que una vara de sueño

¿por qué apoyar la frente
en la luz
a la hora doméstica
en que la verdad se revela?

sólo el hombre justo
sabe que no lo es

CARLOS BATTILANA / PARRILLA

CARLOS BATTILANA

PARRILLA

Sobre el fin de la calle
rumbo al cuartel
hay un asador:

es verano
pero corre una pequeña
brisa.

Mi padre
mi madre
nuestros hermanos
disfrutan de la cena
familiar
al aire libre.

No hay nada que temer
estamos abrazados por el campo
el mundo acontece en ese punto
minúsculo del universo. Tengo
seis años. Conozco
todo
lo que me circunda.
Somos libres
en el lugar.

Mi padre es feliz;
se rodea de sus hijos
de su mujer
tiene información suficiente
para proveernos
durante algunos años:
axiomas, libros, narraciones
de adolescencia.
Ahora que
su muerte es fresca
y reciente, recreo el instante
en que mi padre
distribuye la carne,
las achuras, las ensaladas
en derredor.
Mi madre lo roza con los ojos
y deliberadamente
lo deja hacer
deja que su fuerza crezca
allí, en ese punto
minúsculo del universo.

(de Materia, Vox, 2010)

MIGUEL ANGEL BUSTOS / LOS PATIOS DEL TIGRE

MIGUEL ANGEL BUSTOS

LOS PATIOS DEL TIGRE



                                                              


                                                                                "El tigre, aquel espejo del odio y del espanto"
   


                                                                                                                    Von Jöcker, siglo XVIII



Fueron siempre los pájaros los que anduvieron en los patios
de mi infancia.
A la claridad del canario se sumó el gritito entrecortado
del calafate, el vuelo diminuto de los bengalíes.
Algún mono hubo, pero fue efímero.
Agregaba mi abuelo a la magia reinante sus oros de Gran
Maestro. Sus libros que, de a poco, fueron siendo mis pájaros.
Un tío viajó y en una gran jaula trajo un tigre. Lo aseguraron
a una cadena y esperaron que lo viera.
Su garganta me llamó; aparecí.
El espanto y la maravilla me helaron.
Desde ese día los patios dejaron de ser tales. Fueron selvas
de mármol y mosaicos gastados en donde el terror habitaba.
Era feliz. Tocaba el misterio a diario y no desaparecía. Me
acostumbré ávidamente a lo extraño.
Cuando alguien ordenó su encierro en el Zoológico, lloré.
Entonces comenzaron mis fugaces visitas; temblaba cerca de
su jaula. Su rugido era música tristísima para mí. Le imploraba a su memoria de fiera el recuerdo.
El día en que me fui a despedir de él para siempre me olió, detuvo su andar en círculos. Una sombra humana le cruzó la mirada.
Intenté tocarlo. El griterío prudente me clavó en el piso.
Pensé un adiós, suavemente me marché. Más tarde supe de su
muerte. Su carne fantástica se juntó en el polvo a otras carnes.
He crecido. Guardo de mi infancia sus huesos en mi alma, los libros en mi sangre.
Pero cuando llegue el fin y me miren los ojos que aún no he visto,
pienso que será el tigre incierto de la locura el que me lleve tanteando a la nada, aquel tigre de titubeo y delirio del suicidio que en su boca me ahogará clamando.
O tal vez mi viejo tigre, rayado por la piedad, quiera devorarme como a un niño.







Miguel Ángel Bustos nació en Buenos Aires, el 31 de agosto de 1932. 
Entre 1952 y 1956 desarrolla su pasión por los idiomas (inglés, francés, portugués, italiano) y estudia hasta tercer año en la Facultad de Filosofía y Letras.
Entre 1960 y 1963 viaja por el norte del país, Brasil, Bolivia y Perú. 
Cuando regresa a Buenos Aires en 1964 se casa repentinamente y sufre una internación de casi un año en el neuropsiquiátrico Borda donde conoce a Jacobo Fijman.
Entre 1966 y 1967 el dibujo comienza a ocupar un lugar tan importante en su obra como la misma poesía, al punto que cuatro de sus cinco libros están ilustrados por él. Conoce a Leopoldo Marechal, al que define como su maestro y que prologa “proféticamente” Visión de los Hijos del Mal, publicado por la Editorial Sudamericana y por el que recibe el Segundo Premio Municipal de Poesía en 1968. Conoce a la artista plástica y definitiva mujer, Iris Alba. Entre 1969 y 1975 obtiene una Beca del Fondo Nacional de las Artes, con la que publica su quinto libro. También realiza una importante exposición de dibujos y pinturas cuyo catálogo es escrito por Aldo Pellegrini.
A partir de 1970 se dedica al periodismo como crítico literario, escribiendo en las revistas Siete Días y Panorama y en los diarios La Opinión y El Cronista Comercial.
En 1972 nace Emiliano, su único hijo. Dicta clases en la Facultad de Filosofía y Letras y se dedica al estudio del rumano. El último domingo de mayo de 1976, un grupo de paramilitares lo secuestra de su casa. A partir de ese momento integra la lista de los treinta mil desaparecidos.
(Síntesis de la cronología realizada por Emiliano Bustos, para el libro Despedida de los Ángeles -antología-, realizada por Alberto Szpunberg, editorial Libros de Tierra Firme, Colección Todos Bailan, 1998) .
Se lo considera uno de los grandes poetas argentinos de los años sesenta-setenta. Fue un poeta de su tiempo. Dice de él Jorge Aulicino: “Un mismo aliento exhala todo el cuerpo de esa poesía donde hay pájaros o tigres, dioses o abismos, desiertos, soles y lunas que parecen hablar del mismo mundo pagano. Hay geografías y mitologías. Hay una realidad suspendida en una leyenda”.

Obras de Miguel Ángel Bustos (1957) Cuatro Murales.
(1959) Corazón de Piel Afuera (prólogo de Juan Gelman).
(1965) Fragmentos Fantásticos.
(1967) Visión de los Hijos del Mal (prólogo de Leopoldo Marechal).
(1970) El Himalaya o la Moral de los Pájaros.
(biografìa hallada en   http://bariloche2000.com/noticias/leer/miguel-angel-bustos-desde-su-propio-cielo/39270# )


Miguel Ángel Bustos Von Joecker nació en Buenos Aires en 1932. Fue declarado desaparecido por la dictadura militarel 30 de mayo de 1976.
Cursó estudios de Derecho y Filosofía y Letras. Viajó por el norte de su país, BrasilBolivia y Perú en una búsqueda de la identidad continental que se refleja mágicamente en poemas y dibujos suyos vinculados al surrealismo y la literatura fantástica. Estaba casado con Iris Enriqueta Alba de Bustos.
Entre 1966 y 1967 el dibujo comenzó a ocupar un espacio tan absoluto como el de su poesía; cuatro de sus libros están ilustrados por él. En 1968 obtuvo el Segundo Premio Nacional de Poesía por Visión de los hijos del mal. Cuatro años después nació su único hijo, Emiliano. Era militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). Colaboró como crítico literario en las revistas Panorama y Siete Días, y en los diarios La Opinión y El Cronista Comercial. También fue un asiduo colaborador del equipo periodístico que editaba el quincenario político Nuevo Hombre, que, luego de Silvio Frondizi, dirigía Rodolfo Mattarollo.

(biografìa hallada en Wikipedia )


domingo 4 de mayo de 2014

IDENTIFICARON LOS RESTOS DEL

 PERIODISTA Y POETA DESAPARECIDO


http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-245454-2014-05-04.html

Verdad y justicia para Miguel Angel Bustos

Bustos fue secuestrado el 30 de mayo de 1976 y asesinado en un enfrentamiento fraguado. Recibió al menos dos impactos de bala. Estaba enterrado en el cementerio de Avellaneda.



Por Ailín Bullentini
“La desaparición es un fantasma tan grande que no hay nada que quede por fuera de su marco; aparece todo el tiempo y encierra cualquier pregunta, cualquier interrogante, cualquier hipótesis.” La descripción pertenece a Emiliano Bustos, que la utiliza para definir aquello en lo que vivió y vive desde que tenía cuatro años. Todavía recuerda la noche en la que un grupo de tipos lo encerró junto a su mamá en la cocina de la casa familiar, en Parque Chacabuco, revolvió todo y se llevó a su papá, el poeta, periodista, antropólogo y profesor universitario Miguel Angel Bustos. Desde hace unos pocos días “el foco se cerró un poquito”, confiesa: fue cuando la Justicia confirmó el trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense, que identificó los restos de Miguel Angel, el militante desaparecido.
Hasta hace “algunos meses”, Emiliano sabía mucho de su padre y relativamente poco de lo que había sido de él tras su secuestro. Tiene recuerdos de aquel 30 de mayo de 1976, cuando cerca de las 20.30 una patota que se presentó como de la policía interrumpió por un rato la rutina del sexto B de Hortiguera 1521, en Parque Chacabuco, y cambió su vida para siempre. Se llevaron a Miguel Angel y, desde entonces, para Emiliano no hubo más historia que esa: siempre supo de la militancia de su papá en el frente cultural del Partido Revolucionario de los Trabajadores, por donde también pasaron el escritor Haroldo Conti y el cineasta Raymundo Gleyzer; de su ser poeta –publicó cinco libros de poesía–, de sus colaboraciones periodísticas en las revistas Siete Días y Panorama, los diarios La Opinión y El Cronista Comercial y, con más compromiso, en la publicación Nuevo Hombre, del PRT. Antropólogo, también docente universitario. Cuando creció, Emiliano dedicó muchos años a recopilar la obra poética y periodística de su papá, que en 2007 editó el Centro Cultural de la Cooperación. “Fue una manera de reconstruir lo que pude de él y también reconstruirme yo”, sostuvo.
Casi 40 años después, el EAAF le regaló varias piezas del rompecabezas. Su papá había sido asesinado en un enfrentamiento fraguado el 20 de junio de 1976, 20 días después de haber sido secuestrado. Su cuerpo fue “encontrado” junto al de otras diez personas en la Costa Sarandí, Avellaneda, provincia de Buenos Aires. “El parte del Ejército dice que fue en Lomas de Zamora, pero se confundieron de partido”, detalla Emiliano en referencia a los documentos que sobre el presunto enfrentamiento dejó constancia esa fuerza, una de sus prácticas habituales para eliminar militantes durante el terrorismo que desarrolló la última dictadura cívico militar. El comunicado fue reproducido por los diarios Clarín, La Nación y La Razón. El EAAF cruzó esa información con los registros del Cementerio de Avellaneda, que revisaron para chequear datos de los cuerpos, inhumados como NN, que habían encontrado en fosas individuales. El caso es particular: aquel cementerio fue uno de los principales espacios utilizados por los represores para “desaparecer” los cuerpos de militantes asesinados: allí hay 18 fosas comunes, además de estas 11 individuales –el EAAF las encontró a principios de 1990–. Los registros del cementerio respondieron: esos 11 cadáveres habían sido enterrados el 21 de junio del ’76.
Por aquellos días, la familia de Bustos recién comenzaba la búsqueda. “Yo lo esperé y lo esperé, siempre. Con el regreso de la democracia ya se supo más de lo que había sucedido con los desaparecidos, pero seguimos. La acompañaba a mi vieja a las marchas, Familiares era nuestro segundo hogar”, recordó Emiliano. Nunca supieron nada más. Aún hoy no se sabe en qué centro clandestino estuvo secuestrado. A partir de la identificación de su cuerpo, algunas conjeturas lo ubican en Vesubio. Dos de los cuerpos que aparecieron en las fosas individuales –casi todos fueron identificados– pertenecen a Hugo Mittón y Héctor Fabiani, ambos vistos en ese infierno de Esteban Echeverría, en el sur del conurbano. Fabiani, además, dirigía el frente cultural del PRT donde militaba Miguel Angel, y fue secuestrado con Conti, que también permaneció detenido allí.
“Es una reconfiguración de mi presente, pero también de mi pasado”, confesó Emiliano acerca del cimbronazo de la identificación, que lo sacudió en varios niveles. Además de dónde y cuándo, el EAAF –a quienes se expresó “absolutamente agradecido”– le contó cómo: “El individuo bajo estudio recibió al menos dos impactos de proyectil de arma de fuego que afectaron cráneo”, transcribe la resolución de la Cámara Federal –firmada por los camaristas Martín Irurzun, Eduardo Farah, Horacio Cattani y Eduardo Freiler– emitida el 20 de marzo de 2014, desde el informe del EAAF. La de la Justicia fue la palabra última que selló el 99,9 por ciento de coincidencia entre las muestras aportadas por Emiliano y el hermano menor del poeta a la institución investigadora y los restos de uno de los cuerpos encontrados en el Cementerio de Avellaneda. “Mientras leía el informe volvía a oler el aroma de mi viejo –destaca Emiliano, aún con asombro–. Leí ‘pelo entrecano’ y viajé inmediatamente a los brazos de él, a su cuerpo.”

Miguel Ángel Bustos editado por José Luis Mangieri. Contratapa de Victor Redondo y Horacio Zabaljáuregui


MARITZA KUSANOVIC



 MARITZA KUSANOVIC


Huir del jardín es lo que desea la flor/ atravesar el lugar hasta su bosquejo y borrar/ el trazo la obra la mano perversa/ la tan carnívora flor desea.







1-un padre perdido. 
2-atraviesa el tiempo. 

3-lo encuentran mirando infinito en el mismo paisaje pero como un niño.

4-quiero que nos diga y no responde.  se olvidó de nosotros.

5-pide a su madre.


6-está mirando largo y sin palabra

7-todavia no puso la herencia  todavía no nacemos.

8-pide a su madre.


9-el padre espera la tarde.  levanta la nariz sin olfato.

10-no sabe caminar ni distinguir.

11-pide a su madre.


12-quiero que nos diga y no puede.


13-el padre ya es nuevo cuando su madre todavía no es madre


14-entonces mira desde las sombras y ya nota el resplandor.


15-el padre quiere nacer  y lo esperamos.


16- acomoda la cabeza hacia abajo y pregunta

por qué demoraron tanto









me ayudarás si tengo que caer?
dirás todo va a estar bien y empujarás mi corazón?



cuando sea el momento   seremos avis males?




CAROL ANN DUFFY / TAZA Y PLATO DE OPPENHEIM / traducción Jonio González

CAROL ANN DUFFY




TAZA Y PLATO DE OPPENHEIM 
                                         dedicado a Meret Oppenheim



Me pidió que almorzáramos cubiertas de pieles. Lejos de
las risotadas de los hombres, nuestra agitada vida secreta.

Recuerdo sus ojos, la delgada cuerda de su columna vertebral.
Ésta es tu taza, susurró, y ésta es la mía.

Bebimos el líquido dulce y caliente y nos dijimos guarradas.
Y me desvistió, sus pechos eran un espejo

y había espejos en la cama. Dijo Pon
las piernas en torno a mi cuello, así. Sí.




(traducción Jonio González)







Carol Ann DuffyCBE (nacida en Glasgow, en 1955) es una poeta británica. Es Poeta Laureada, es decir, poeta de la corte de Inglaterra desde abril de 2009.1 2 Duffy es la primera mujer, la primera escocesa y la primera persona abiertamente homosexual que obtiene el puesto.3
Duffy vive en Mánchester y es catedrática de poesía en la Manchester Metropolitan University. Vive su homosexualidad abiertamente y tiene una hija.4

La autora ya fue propuesta para el puesto en 1999. El título se entregó por entonces a Andrew Motion, que limitó su ejercicio a diez años. Ganó en 1983 el National Poetry Competition, en 1988 el Premio Somerset Maugham y en 1993 los premios Costa Book Award y Forward Poetry Prize, así como el T. S. Eliot Prize en 2005. Ha ganado en varias ocasiones el Scottish Arts Council Book Award.




CLAUDIO PORTIGLIA

CLAUDIO PORTIGLIA

Ahora que es tarde para mí para vos para la transformación posible / nos sentamos en el cordón de la vereda / y vemos la pendejada idiotizarse con la versión más reciente de los espejitos / donde los sinnombre se miran y gesticulan / y entienden / o no / que los espejos reflejan el alma / pero no siempre devuelven los rostros / no siempre confirman la identidad

(de "La mosca de la fruta")

FABIÁN O. IRIARTE / POESÍA CONFESIONAL

FABIÁN O.  IRIARTE

POESÍA CONFESIONAL

Cuando estoy sentado en la bañera
mirando mis pies como en esa pintura
de Frida Kahlo, ella misma poeta de la confesión…

No tengo cáncer pero podría tenerlo.
Podría tener que admitir, como Robert Lowell,
una vida doméstica un poco complicada,
reprimida o histérica.

O como Anne Sexton, debería
acudir al psicoanalista.
Derrochar los talentos del lenguaje,
la miel de las conversaciones en penumbra.

O como Sylvia,
desdichada Sylvia, qué idea,
meter la cabeza en el horno.

A veces asoman, como pidiendo permiso,
pequeñas crisis, íntimos dramas, que vienen
y se van sin nada resolver y dejándome
más fatigado.

No sé si tengo cáncer de próstata.
Pero no tengo vulva. Ni vagina. Ni casa
en Nueva Inglaterra.

Alquilo una casa en forma de U, con un cantero verde
en el medio y una gotera en el techo.

Y veo la lluvia caer
interminable, los viernes del invierno.
Las imágenes se repiten, como si no hubiera nada más

ANNA VILÁ / "Still kissing at the Chapeau Rouge"

ANNA VILÁ

"Still kissing at the Chapeau Rouge"


Algún día seré todos los gatos de Roma
y me deslizaré, multiplicada y redonda,
por las piedras de tu memoria.
Encontraré los zapatos,
los de los mil puentes,
 y la ciudad será otra,
tu llanto al revés
y la canción del sombrero rojo
pudriéndose en alguna de mis bocas.


(Roma, Novembre de 1998. Pensant en una història amb un desconegut en una altra ciutat plena de ponts: Praga.
Publicat al llibre Almario de palabras, Ed. Save us, 1999.))

LEONOR SILVESTRI / KRONSTADT, NO TE OLVIDO NO

LEONOR SILVESTRI

LEONOR SILVESTRI

KRONSTADT, NO TE OLVIDO NO

El joven anarquista dogmático y febril no lo entenderá
El tonto y mesiánico troskista no lo entenderá
El limitado militante limitante no lo entenderá
El anacrónico enamorado de santos,
mártires y pseudo glorias
del pasado no lo entenderá.
 Que se sepa, que se sepa :
El marinero de Kronstad era puto,
amaba a otro marinero, puto, como él
le gustaba otro varón, con olor
a arenque marinado,
le gustaba, insisto, calentarse cucharita,
pija contra culo, barba contra barba
piel contra piel
puto puto puto
para mí no es un dato menor.
Contra toda evidencia
como señoras de barrio avergonzadas
de la pasión que otra pasión excita y alimenta
no querrán ver no, no querrán



https://acercadelascostumbresdelosanimales.blogspot.com/2012/05/comentario-de-alicia-gallegos.html

foto de Alicia Gallegos